Esta historia va de un bebé que sobrevivió a un terrible asesinato y se quedó solo en la vida. Escapa por los pelos de un final terrible escondido en un cementerio donde los fantasmas le adoptarán y crecerá a medias entre el mundo de los vivos y de los muertos. Y, según se haga mayor, tendrá que descubrir sus orígenes, tratar de volver a donde pertenece. Y en ese proceso se verá inmerso en algunas increíbles aventuras y conocerá seres de ultratumba realmente escalofriantes. La historia es muy imaginativa y está narrada en el habitual tono del autor, con su humor irónico característico. Aunque no tiene grandes sobresaltos, mantiene adecuadamente el interés y resulta una lectura ágil y divertida. Otra obra de Gaiman que me gusta. Otro punto más a su favor. |