Coraline podría ser un cuento para niños (mayorcitos, eso sí, porque tiene pasajes algo oscuros, casi de terror), pero también es un maravilloso relato para adultos. A través de los ojos de una niña participamos de una historia en la que el aburrimiento, la soledad y el desapego y falta de atención de unos padres volcados en su trabajo la llevan a un mundo alternativo de fantasía oscura que la quiere atrapar para siempre. ¿Lo conseguirá? Es una historia llena de simbología que por momentos recuerda a la de Alicia en el país de las maravillas y que nos habla de valentía y de amor. Muy bien ejecutada, llena de detalles que encajan con la precisión de un reloj suizo me ha encantado leerla y comentarla en lectura conjunta con el grupo #atreyu_fantascifi del @clubliterario_atreyu. El lenguaje es muy sencillo, así que aunque la he leído en inglés es muy fácil de seguir y os recomiendo muchísimo esta edición ilustrada por Chris Riddell, que es una auténtica maravilla. Con este libro participo en el #readingbingo de @noedevoralibros en la categoría “El título es un nombre” y en el reto #unlibroeninglésalmes de @natinbooks |