Los pilares de la Tierra

Este es el libro número 50 que leo este año y me hace especial ilusión, ya que es una relectura. La primera vez que leí Los pilares de la tierra fue allá por 2007, cuando tenía 14-15 años y me encantó, aunque recuerdo que me salté algunos párrafos descriptivos de más.

En esta ocasión he intentado no saltarme nada, aunque es verdad que en algunos tramos se me ha hecho duro, porque describe demasiado aspectos de arquitectura que a mí personalmente me dan bastante igual.

Aún así, la historia me ha vuelto a encantar. Recordaba a Tom, a Ellen y sobre todo, a Jack y Aliena, personajes que me encantaron en su día y que han vuelto a enamorarme. También he vuelto a odiar a William, un personaje de lo más odioso y repulsivo. Porque puede haber villanos (de hecho, los hay) pero William no me parece que sea uno, sino una persona rastrera y, además, estúpida.

La historia se centra en la construcción de la catedral de Kingsbridge y conocemos la historia de los personajes a lo largo de los años. Comenzamos con Tom y su familia cuando son niños y, al terminar, ya tienen los críos hasta nietos 😱 Me ha encantado ver cómo evolucionan y, a la vez, se cuenta la historia en la Inglaterra de la Edad Media, con sus disputas entre reyes, guerras civiles, el tema político-religioso, etc. No soy alguien a la que le apasione la historia y, aún así, puedo decir que he disfrutado mucho leyendo este libro.

Espero pronto poder releer Un mundo sin fin, un libro que también leí hace años, pero que quiero volver a hacerlo antes de meterme con el tercer tomo.