Las tinieblas y el alba

Ken Follet nos vuelve a deleitar con una novela histórica que nos presenta como precuela de "Los Pilares de la Tierra". Aunque no termina exactamente donde comienza su más famosa novela, sino casi un siglo antes, "Las Tinieblas y el Alba" nos transporta al año 997 y, acompañados de algunos personajes entrañables y de algunos otros muy malvados, nos adentra en una Inglaterra convulsa a finales de la Edad Oscura, de la cual no se tienen muchas referencias documentadas.

Es innegable que Follet sabe como cautivar al lector y atraparle en su historia, una historia que, aunque semejante a otras que ha escrito, te mantiene atado a la lectura y en tensión siguiendo la trama y esperando que al final triunfe el amor y la verdad.

Junto a Ragna, Edgard y Aldred, sus principales protagonistas, nos adentramos en esos años de la Edad Oscura, conocemos como vivían las gentes de los diferentes estratos sociales de la época, las rivalidades y las envidias, las injusticias, las calamidades, las incursiones de los vikingos, el trato a los esclavos, etc...

El autor urde una historia en la que nuestros protagonistas sufren las injusticias de unos gobernantes que solo buscan enriquecerse sin importarles a quien pisotean, utilizando todos los medios a su alcance para lograrlo. Pero al final... ¿Logrará imponerse la bondad y la verdad? ¿Pagarán los malvados por sus fechorías? Éstas y otras muchas preguntas que te irás formulando a lo largo de la lectura quedarán satisfechas al finalizar la lectura.

No puedo ser muy objetiva con Follet, pues me encantan sus novelas, pero me atrevo a recomendarte esta lectura con la esperanza de que la disfrutes como yo.