InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
Las mejores frases de Muertes pequeñas (1)

LAKY
LAKY 01 November 2018
Nos encontramos en Queens, en el verano de 1965. Los dos niños Malone, Frankie y Cindy, de cinco y cuatro años de edad, desaparecen una noche de su habitación. Las sospechas de la policía pronto recaen en su madre, Ruth Malone, una atractiva y provocativa mujer, divorciada, de vida un tanto licenciosa.

Para Pete Wonicke, periodista, es su primer caso de importancia y está dispuesto a darlo todo hasta el punto de llegar a obsesionarse con el caso y, sobre todo, con Ruth Malone

“Muertes pequeñas” es una novela de ficción inspirada en un caso real: el de Alice Crimmins.

La novela comienza con la peor pesadilla de cualquier madre: la desaparición de sus hijos. Los dejó acostados por la noche en su cuarto y por la mañana no se encontraban allí. La ventana estaba cerrada, todo indica que quien sea que se los ha llevado, los ha sacado por la puerta. ¿Pero cómo es posible? Es cierto que Ruth muchas noches los deja solos para irse a tomar una copa a un pub, pero ella afirma que cuando volvió de pasear a la perra, entró en su habitación y los niños dormían tranquilamente. ¿O estará mintiendo y será que la propia Ruth les ha hecho algo?

Para Ruth esto sólo es el inicio de una pesadilla que irá in crescendo ya que, encima de haber perdido a sus hijos, las sospechas recaerán sobre ella. Su vida licenciosa, el hecho de que ligase con hombres incluso cuando aún vivía con su marido, el que no se desmorone como haría cualquier madre sino que su comportamiento pueda hasta llegar a ser frívolo, no le favorece en una sociedad conservadora y criticona. Ella no es como las demás madres, no es como las demás mujeres, y la sociedad no se lo perdona.

¿Y el lector? Personalmente, no me ha caído bien Ruth Malone. Efectivamente, no llego a entender su forma de comportarse; no su vida sexual ni afectiva sino cómo reacciona ante la desaparición de sus hijos. Se comporta de forma muy rígida, sin llorar, sin desmoronarse; es muy difícil empatizar con ella. Y, sin embargo, ¿cómo pensar que una madre pueda matar a sus hijos? La novela juega con la duda todo el tiempo: nos enseña cómo es Ruth y cómo la ve la sociedad pero nos hace dudar hasta las últimas hojas. Nos iremos formando nuestra propia opinión, quizás hasta la cambiemos varias veces, y ya veremos si acertamos.

Me ha gustado muchísimo como desarrolla Emma Flint la historia. Es su primera novela y la verdad es que hay que quitarse el sombrero ante su forma de escribir. Primero por cómo maneja la intriga con, realmente, tan pocos elementos para ello (pues, al fin y al cabo se trata de un sí o un no: “lo hizo o no lo hizo”). Segundo por cómo, teniendo la novela un ritmo más bien pausado, consigue mantenerte atenta en todo momento. Tercero por lo bien que transmite al lector la sensación que Ruth Malone causa en las personas. Yo también he sentido esa fascinación que hace que, te guste o no, no puedas apartar los ojos de ella. Me he creído la obsesión que llega a sentir Pete Wonicke por ella; incluso la obsesión de los policías (aunque sea por otros motivos).

Y me ha gustado también todo lo que rodea a la novela. Por ejemplo, la magnifíca ambientación en Queens en los años 60. O la fuerza de la opinión pública. O el juicio de valores que a veces hacemos a las personas que hace que, porque su comportamiento no sea el socialmente aceptable, ya las creamos capaces de cometer los más aberrantes crímenes. Sin duda, no es lo mismo acostarse con muchos hombres que matar a tus propios hijos.

Toda la novela se basa en un personaje muy fuerte: Ruth Malone. Una mujer que no deja a nadie indiferente. Atractiva, cuida mucho su imagen, siempre correctamente vestida y maquillada, muy sensual, fascina a los hombres. Pero no sólo su imagen llama la atención, también su comportamiento. No actúa como se supone debería actuar una mujer que ha perdido a sus hijos; ella mantiene intacta su fachada exterior, no se muestra hundida ni siquiera vulnerable, no permite que la vean sin maquillaje, incluso se va a comprar un vestido al día siguiente de desaparecer sus hijos. Pero, ¿eso la convierte en una asesina?

Junto a ella tenemos muy pocos personajes. Como su ex marido, un pobre hombre que no logra superar la separación. O el policía encargado de la investigación y que no ve a nadie más que a Ruth como potencial culpable. O las vecinas del inmueble donde vivían los niños. O, uno de los que más me han gustado, el periodista Pete Wonicke. A través de él he sentido la fascinación que Ruth provoca en los demás; no hay mejor ojos para mirarla que los suyos. Sin conocerla de nada, se va a obsesionar con el caso y, más en concreto, con ella, hasta hacer que su vida entera de un giro total

La escritura de Emma Flint es impecable; ha realizado un gran trabajo de documentación y lo ha plasmado en una novela que, en cierta forma, aúna la novela de intriga y la novela de investigación. Una novela para leer despacio pero que consigue mantener constante la intriga y las dudas del lector. Y que tiene sorpresa final; a mí, al menos, me ha sorprendido (y eso que, en realidad, es totalmente obvio y coherente, casi me he dado de cabezazos al entenderlo todo)


Conclusión final

“Muertes pequeñas” es una gran novela. Muy bien escrita, con unos personajes potentes y en una edición preciosa e impecable
+ Leer más
Comentar  Me gusta         00


    Comprar este libro en papel, epub, pdf en

    Amazon ESAgapeaCasa del libro




    Test Ver más

    La Metamorfosis

    Gregorio Samsa es un ...

    escritor
    viajante de comercio
    banquero
    burócrata

    13 preguntas
    830 lectores participarón
    Thème : La metamorfosis de Franz KafkaCrear un test sobre este libro