Silencio

Llevaba tiempo queriendo traeros la reseña de “Silencio”, la tercera parte de la saga “Hush Hush”. Me leí los dos primeros libros de esta saga hace algún tiempo y me gustó bastante lo que me encontré entre sus páginas. Debido a mil cosas tuve que dejar esta historia un poco de lado, pero gracias a este tiempo de cuarentena por coronavirus he podido continuarla por fin.

Me declaro una gran fan de las historias donde aparecen criaturas paranormales, y en esta saga, en concreto, aparecen unas de mis favoritas, los ángeles. Por lo que desde ya quiero aclararos que mi opinión sobre esta historia, seguramente, este algo influenciada por esto.

Nada más empezar a leer, nos encontraremos con una Nora algo distinta a la que conocemos, ya que, actualmente, Nora no tiene recuerdos de nada de lo ocurrido en los cinco últimos meses.

¿Qué ha pasado? ¿Por qué no puede recordar nada de su vida durante este tiempo?

Las dudas y la desconfianza rondarán, constantemente, por su cabeza. Sobre todo en el momento en que su madre anuncia que Hank Millar y ella están saliendo. Algo no va bien y lo peor es que la falta de esos recuerdos empieza a no parecerle una coincidencia. Nora no puede confiar en nadie, pero sus instintos le dicen que busque a ese chico de pelo y ojos negros que aparece en sus sueños. Puede que la verdad esté más cerca de lo que ella piensa.

Hasta aquí os puedo contar para saber más tendréis que leer la historia completa.

Después de la acción y el gran final de infarto que tuvimos en “Crescendo”, no podía más que pensar en como iba a continuar la historia en este nuevo libro. Para mi sorpresa, la autora continua con la trama pero en un tiempo algo futuro de donde nos quedamos. Concretamente, tres meses después de los hechos vividos en Delphic .

No os podéis ni imaginar mi cara cuando después de ese final, me encuentro con que el libro empieza así. Desde el minuto uno empezaremos con las dudas y las preguntas ya que mientras vas leyendo, sientes que hay un trozo de la historia que no se ha contado. Nos falta información y esta se nos irá dando a medida que vayamos adentrándonos en el libro.

Una vez más, la autora utiliza esta técnica para mantenernos en constante duda. Como digo, no es nada nuevo encontrarnos con esto, ya que Becca Fitzpatrick ha ido utilizando, anteriormente, este método con el resto de libros de la saga.

Aun así, no sé como sigue funcionando. Siéndoos sincera, me siento un poco idiota ya que con cada libro vuelvo a caer una y otra vez en lo mismo ja ja.

Empezamos sin saber nada y llenos de dudas, lo que da lugar a que no podamos parar de leer buscando respuestas para finalmente, darnos toda la información que necesitamos llegando a un desenlace de infarto que nos deja con ganas de más.

Como os digo no sé como pero gracias a esto me he vuelto a enganchar a la saga de nuevo.

A lo largo de la lectura, he sentido que la trama principal se ha quedado un poco en segundo lugar, ha perdido fuerza. Esta vez, la historia se centra demasiado en la relación entre Patch y Nora. Me encanta el romance entre estos dos, pero creo que se le ha dado demasiada importancia en este libro. Hace así que todo el tema de los nefilim y la mano negra no se termine de desarrollar bien, que se quede algo colgado. El resto de personajes casi ni aparezcan en la historia.

El final, una vez más, ha sido de infarto. Desde ya os digo que necesito, como el beber, el siguiente libro porque esto no puede acabar así. Me da mucha pena pensar que hubiese disfrutado mucho más la historia si en esta se hubiera desarrollado la trama un poco más.

Una vez más la historia estará narrada en primera persona desde el punto de vista de Nora. Tengo que deciros que este personaje no me termina de convencer mucho. Su personalidad me resulta algo irritante. Su forma de actuar hace que se vuelva un personaje pesada. Encima, al estar todo narrado desde su punto de vista, es incluso más intenso. Su romance es muy bonito, pero realmente no se qué le ve Patch a esta chica.

Me hubiera encantado encontrarme con algún capítulo narrado por Patch en la historia. Aunque cada vez vamos sabiendo más sobre él, sigue pareciéndome un personaje la mar de misterioso. Pero debo de admitir que en este libro, he sentido que por fin hemos podido verlo casi en su totalidad. Sigo pensando que todavía nos tiene que soltar algún bombazo. Gracias a que la trama se centra más en su relación con Nora, podremos ver comportamientos que hasta ahora desconocíamos en él. Sin duda es mi personaje favorito de la saga y en cada libro se va superando más y más.

Sobre el resto de personajes, deciros que casi no tendrán un papel en la historia. Se vuelven todos muy secundarios. Incluso a Hank, el que es supuestamente el villano, le quitan parte del protagonismo. Debido a esto, no me he terminado de creer mucho su papel de malo. Me ha faltado algo más de justificación del porque está detrás de todo lo que hacía.

Es una pena que haya pasado esto con los personajes ya que los hemos llegado a conocer bastante en anteriores entregas y me hubiera encantado que aparecieran algo más. He echado en falta las bromas de Vee, ese rollo que tiene cuando esta con Nora y con Scott. Me ha pasado más de lo mismo, casi no se le ve el pelo en todo el libro.

En conclusión, la historia me ha gustado y me ha mantenido intrigada todo momento. Pero si la comparo con sus anteriores entregas, este libro es algo más flojo en cuanto a trama. Se nota que no está tan bien hilada y por eso ha perdido un poco de fuerza, volviéndose algo secundario. En mi caso, no he tenido problemas porque me gusta el romance entre los protagonistas. Pero al no haber casi historia puede que haya gente que no lo disfrute igual que los primeros libros.

Ya solo queda el gran final por lo que espero leerlo pronto para ver que tal termina todo.
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