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Esta cuarta y última parte arranca justo donde acabó la tercera. En ella se desarrollará la madurez y vejez de Lila y Lenù y los acontecimientos que provocaron que ésta decidiera escribir sobre la amistad entre ambas en el presente, ahora, con setenta años. Finales de los años 70 del siglo pasado. Lenù ha tomado una decisión: se separará de Pietro para estar, por fin, con Nino. Se llevará a sus hijas con ella, seguirá escribiendo, viajando, promocionando sus novelas y, lo más importante, volverá a Nápoles. Toda su felicidad está puesta en ese amor infantil por Nino que ahora se consolidado… y Lila asiste como espectadora al derrumbe de estas ilusiones, igual que le pasó a ella en su juventud. Lenú ahora repite los pasos de Lila. de nuevo, veremos las dificultades a las que se enfrenta la mujer separada de esa época: rechazo por parte de la familia, crítica social. Ahora, con cuarenta años y de vuelta a su barrio de Nápoles se cierra el círculo y el camino de ambas vuelve a ser similar. Compartirán el cuidado de los hijos y un nuevo embarazo: Lila esperando el bebé de Enzo (que ya se han consolidado como pareja) y Lenù el de Nino. Pero aún sigue estando esa dualidad: Lila, ahora es reconocida en el barrio ahora como mujer de negocios próspera, mientras que Lenù lo es de forma nacional e internacional por ser una escritora de éxito. Cada una ha logrado triunfar a su manera. La siguiente época no será fácil para ninguna de las dos: tendrán que hacer frente a los trastornos de la edad, los hijos, las parejas y la muerte. Lenù seguirá escribiendo siempre. Ahora escribe sobre Lila debido a la desaparición de ésta al inicio de la “La amiga estupenda”. Lenù siempre ha tenido la certeza de que lo que tiene que ver con su amiga le parece más significativo que lo suyo. Pero la realidad es que los pasos de una, son los actos de la otra y así lo han sido hasta el presente. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. |
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