Fabricante de lágrimas

A quienes son diferentes se los reconoce enseguida. Tienen mundos allí donde los demás tienen ojos.

Y la niña le dijo al lobo:
-Qué corazón tan grande tienes.
-Solo es mi rabia.
Y entonces ella dijo:
-Que rabia más grande tienes.
-Es para ocultarte mi corazón.

Curarse significa... tocar con amabilidad cualquier cosa que antes había sido tocada por el miedo.

Vestida de dolor, ella seguía siendo lo más bello y resplandeciente del mundo.

Que decir algo a veces es mejor que no decir nada, porque hay cosas que nos hacen bien solo en el momento en que alguien nos escucha decirlas.

Deja que yo vea por ti, porque tú no sabes mirarte.

"Es posible que nuestro mayor temor consista en aceptar que alguien puede amarnos sinceramente por lo que somos."

Algunas cicatrices nunca dejan de sangrar. Hay días en que se fisuran y las tiritas no bastan para sanar las heridas.

Hubiera deseado entregarle mi corazón y saber que él también sentía aquella necesidad que hacía que todo lo demás dejase de tener sentido.
De pertenecernos.
De estar juntos.
De estar abrazados así.
Alma contra alma.
Y corazón contra corazón.
Y mezclar nuestras grietas, hasta dejar de tener miedo…