El fantasma y la señora Muir

El fantasma y la señora Muir es un libro que se lee sólo, vas pasando las páginas sin darte cuenta a medida que te integras en la vida de Lucy Muir. No puedo decir que sea una historia excepcional pero sin duda es entretenida y como indicaba de fácil lectura. Ideal para intercalar con lecturas densas.

Fue escrito en 1945 por Josephine Leslie con el pseudónimo de R. A. Dick, con una pluma es fresca, fluida y cercana, que le proporcionó dos años después una adaptación a la pantalla.

La historia comienza con nuestra recién enviudada Señora Muir, que además de ver trastocado su estado marital, verá como su cómoda vida tiene que dar paso a una vida de restricciones ya que su marido se ha ido dejando una economía familiar bajo mínimos. Lejos de amilanarse Lucy decide romper con su día a día de salones de té y clubes de lectura, para mudarse con sus hijos a un sitio más asequible que les permita al menos cubrir las comodidades básicas.

En su búsqueda de hogar encuentra una casa a muy buen precio, demasiado buen precio… y es que se dice, se rumorea, que esa casa está encantada y el fantasma del anterior dueño vaga por las habitaciones impidiendo que su antigua morada sea invadida por nadie.
Lo primero que os recomiendo, es que no leáis la sinopsis y os dejéis llevar por la historia. Es la típica sinopsis que cuenta más de lo que debe, de hecho, te hace estar esperando algo que realmente no es el quiz del libro.

Os invito a conocer a Lucy, una mujer que a pesar de haber vivido en algodones, se da cuenta en este momento de su vida que ella es capaz de tomar sus propias decisiones y poco a poco se va empoderando para afianzar el sentimiento de que ella mejor que nadie puede tomar las decisiones adecuadas para su propio bienestar y el de sus hijos.

Lo único que me ha gustado un poco menos es que la historia se va precipitando según avanzamos y la parte final es un poco abrupta.

Se la recomiendo a todo tipo de lectores.

¿Queréis saber si el rumor de que vive un fantasma en la casa es cierto?.

Si queréis saberlo…. Tendréis que leerlo.

(Hacía mucho que no utilizaba esa frase 😉).