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Este es el primer libro de la trilogía Jardín químico, un mundo distópico, post-apocalíptico, donde los hombres viven hasta los veinticinco y las mujeres hasta los veinte, a causa de un virus mortal que afecta a la juventud. Rhine, el personaje principal de esta novela, se cría junto a su hermano mellizo Rowan. Pero a sus dieciséis años, es secuestrada junto con otras chicas para ser seleccionadas para casarse con un joven adinerado llamado Linden y así darle hijos, la única manera de evitar que los seres humanos no se extingan. Llevada a una enorme mansión con jardines hermosos, allí conocerá a Rose, la primera mujer de Linden, que a sus veintiún años se encuentra moribunda por el virus. También entablará una relación con Gabriel, un esclavo que es enviado para atenderla y con el que congenia de primeras, pero pronto desaparecerá. Y si bien le entregan una vida de lujos, Rhine lo único que piensa es en escapar y llegar a la ansiada libertad. La narración de la escritora es buena, amena, pero encontré esta novela un poco lenta y donde los giros no están muy claros. Si bien encontramos personajes de todos los tipos, como puede ser Jenna y Cecilia, esposas también del joven, pero ninguno desarrollado en profundidad. Una verdadera lástima, ya que la trama de este libro, me había encantado, pero no llegó a colmar todas mis expectativas. En definitiva, si buscáis una lectura amena, simple, sin grandes giros ni pretensiones, esta es tu novela. Ideal para relajarte un fin de semana sin dolores de cabeza. |
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