Fieras familiares

Tener reptiles de muchas clases en casa puede complicar la vida familiar, pero el caso de Andrés es bien distinto: todos aceptan su pasión y le apoyan en lo que pueden. No obstante, no todo el mundo entendería el vivir con un cocodrilo enorme.

Este libro me ha parecido sumamente entretenido e interesante. En él encontramos las vivencias hasta ahora del autor, Andrés Cota Hiriart, cuya pasión son los animales, y sobre todo los reptiles. Y digo hasta ahora porque es joven y seguro que tiene muchas más aventuras.

El libro tiene dos partes diferenciadas: Cautiverio y Libertad. Antes de comenzar la primera, tenemos un texto a modo de prólogo que nos invita a pasar al museo de la vida del autor.

En la parte de Cautiverio, Andrés nos habla de cómo nació su pasión por los reptiles y cómo comenzó a llevar animales a casa. Así, nos presenta las criaturas con las que convivió durante años, muchas de ellas peligrosas, y cómo las cuidó y alimentó de manera que no solo se reprodujeron sino que su vida duró mucho tiempo.

En la segunda parte del libro, Libertad, Andrés nos habla de sus viajes por el mundo natural, desde Malasia hasta las islas Galápagos, para ver las criaturas más asombrosas que pueblan nuestro planeta. A través de estos viajes, nos entrarán ganas de conocer de cerca estos parajes naturales, y a todos los animales y plantas que viven en ellos.

Al final del libro, Andrés nos dice adiós desde su particular museo, con otro breve texto en el que resume su parecer acerca de cómo nos estamos comportando con el planeta desde que los humanos comenzamos a existir.

Una lectura fascinante, que anima a cuidar mejor de la Tierra y de todos los seres que viven en ella. Una cura de humildad para los Homo Sapiens.