El argumento de partida es muy atractivo, dos adolescentes que se han criado juntos porque sus padres son amigos y pasan sus veranos en una casa junto a la playa, se aman desde la niñez y están predestinados a ser una pareja, pasan de los juego infantiles y amigos inseparables, al despertar del sexo y del amor, hasta que se inmiscuye una tercera persona... A pesar de gustarme Colette en otras novelas que he leído de ella, en ésta, su prosa me parece un poco enrevesada y poco clara hacia el final, en el desenlace de la trama.
|