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En cuanto vi que este libro lo había escrito el maestro King me lancé de cabeza, y con más ganas sabiendo que era para un trabajo de clase🤭. . Es un libro corto, narrado en primera persona. Paul Edgecomb es un carcelero muy amable, es muy fácil empatizar con él y seguir sus reflexiones sobre la naturaleza de la silla eléctrica y la moralidad de la pena capital. Como personajes secundarios, tenemos a sus compañeros, y dos o tres presos más. Fue duro y a la vez muy interesante ver el trato que tenían, sabiendo que su estancia en prisión sería corta. . Por otra parte, John Coffey inicia el gran misterio que enmarca esta novela. Es un hombre negro de gran tamaño, acusado de asesinar a sangre fría a dos niñas, pero que parece tener el alma tierna y sincera de un infante. Eso ocasiona dudas a Paul, pero más cuando ve que ese hombre le cura mágicamente una enfermedad. Eso llevará a una carrera y reflexión a contra reloj sobre si hay alguna forma de perdonar la vida de ese hombre, si hay alguna forma de demostrar que podría ser inocente, y sobre si, debido a la incredulidad de la gente, un inocente debería cumplir con una sentencia de muerte. . Ha sido un libro duro, con algunas escenas algo macabras, pero muy sencillo y ágil de leer, así como muy interesante. |
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