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No me ha terminado de gustar esta novela, esperaba más de esta relectura de un caso de Hércules Poirot, aunque tiene algunas cosas buenas, no compensa en la valoración final de la novela. En esta novela Poirot junto al fiel Hastings intenta desenmascarar a los miembros de una organización criminal, este no es el tipo de novela al que me tiene acostumbrada Agatha Christie. Hasta el 70% de la novela se basa en acontecimientos que les ocurren a los protagonistas o en casos que investigan que al final descubren que detrás de ellos están Los Cuatro Grandes, me ha costado entrar en la novela si es que he llegado a entrar del todo en algún momento, aún no lo tengo claro, y en ocasiones se me ha hecho lenta y pesada. A partir, de ahí comienza la investigación propiamente dicha, y van averiguando quién está detrás de Los Cuatro Grandes, el número Uno, un chino Li Chang Yen, es el que maneja los hilos, el número Dos, un estadounidense simboliza el dinero, el número Tres, una francesa es científica y el número Cuatro, el más peligroso, "El Destructor". Tampoco me ha ayudado que en está ocasión Poirot protagonice la novela junto a Hastings, el personaje más aburrido, simple y con menos luces de Agatha, lo que he echado de menos a mi querida Ariadne Oliver. |
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