Año 2003. 302 páginas. Nuestra protagonista es Kambili, una joven de 15 años que vive con su hermano mayor Jaja y su familia, en una ciudad Nigeriana llamada Enugu. El padre de Kambili es propietario de varias fábricas y un fanático religioso, muy elogiado por el sacerdote de su parroquia y por el pueblo en general por sus buenas acciones en la comunidad. Hace generosas donaciones y publica en el periódico opinando sobre temas políticos. Esta magnifica imagen social no tiene nada que ver con el padre estricto, autoritario y violento que es en casa, usando la voluntad Dios como justificación de sus actos, y sometiendo a su familia a unas normas que rozan el delirio. Es un libro durísimo. No os he querido contar mucho en el resumen porque me parece un libro que hay que leer y dejarse sorprender. Es una mirada del mundo desconocida para mi. En mi casa siempre hemos sido ateos y el fanatismo religioso me sorprende y asusta a partes iguales. Conocer un poco más la realidad de las mujeres nigerianas en la época poscolonial también ha sido revelador para mí. Este libro, duro y realista, me ha removido mucho por dentro y creo que es de esos que no dejan indiferente a nadie. Es tan interesante lo que te muestra que aunque haya partes un poco más lentas, necesitas seguir leyendo. Puntuación: 8/10 El primer libro que leo de Chimamanda, pero seguro que no el último. ¿Me recomendáis alguno más de esta autora? |