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Es una de las mejores novelas del autor aunque, para mí, no supera a "El día que se perdió la cordura". La historia está contada dando diferentes saltos en el tiempo y me encanta porque puedes ir hilando poco a poco todas las tramas y subtramas en la que se centra la novela. Es un libro que se lee bastante rápido, no solo por el enganche que genera, sino también porque sus capítulos son cortos y con una letra enorme. Ya lo he dicho en anteriores reseñas, pero la pluma del autor me gusta mucho. Es una pluma perfecta, sencilla y directa, pero a la vez con descripciones tétricas e impactante que te ponen los pelos de punta. La historia tiene varios narradores, en primera persona por Miren y tercera, dándonos las diferentes perspectivas de varios personajes y escenas. El autor ha hecho un trabajo excelente en cuanto a creación de personajes. Tiene una profundidad impresionante. Yo sigo a la familia del autor desde hace años en Youtube, y es que sentía cómo Javier, para traernos esta historia, puso sus sentimientos, su alma y sus miedos en esta novela y en concreto en los padres de Kiera. La trama es muy dolorosa y, por desgracia, realista. Lo único que no me convenció fue que Javier intenta dar su punto de vista o abrirte los ojos sobre ciertas críticas sociales muy importantes, pero abusa demasiado de eso haciendo que la novela parezca más repetitiva y lenta. Y por eso a medida que avanzaba con la novela sentía que flojeaba. E El final es un poco predecible, pero yo lo viví igual. Hay unas últimas escenas que no me esperaba y que me hicieron tener el corazón en la boca. Aunque hay una escena en específico que me faltó un poco más de profundidad. Y esa escena se lo merecía. INSTAGRAM: @viviendoentrehistoriass Enlace: https://viviendoentrehistori.. |
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