El día que se perdió la cordura

Javier Castillo es un sueño de escritor. Te pueden gustar más o menos sus historias, pero desde luego su forma de escribir te envuelve. Y para mí eso es tan importante como unos buenos personajes o una buena trama.

Confieso que algunas cosas me parecieron un poco predecibles, puede que porque al leer tanto del género más o menos sé interpretar los pequeños clichés y haya cosas que me resultan más obvias, pero aún así, disfrute muchísimo la novela.

👍🏻 Lo mejor ☞ Su forma de contar la historia. Javier escribe con el alma y eso se nota en todos los capítulos de la historia. Te hace empatizar con todos los personajes, independientemente de sus acciones, y ese es su segundo gran fuerte, la calidad de los personajes.

Además, Javier consigue algo que me encanta y es atar hasta la más mínima coincidencia a la perfección. Algo que no todas las novelas hacen y que me da mucha rabia.

👎🏻Lo peor ☞ Algunas cosas eran predecibles, y aunque creo que el desarrollo de la novela es fantástico, me parece que caía en los típicos clichés de la novela negra, con lo cuál le restaba expectación a la novela.