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En Ciudad de fuego celestial, último libro de la saga principal de Cazadores de Sombras, Simon acompañó a sus amigos al infierno para rescatar a Magnus y al resto de miembros de la Clave que yacían allí retenidos por Sebastian y sus cómplices. Para lograr escapar de allí, Magnus tuvo que recurrir a su padre, Asmodeus, uno de los príncipes de los demonios, y este se ofreció a rescatarlos a cambio de que Magnus se quede atrapado en el infierno para siempre. Como Simon no puede soportar que Alec y Magnus sufran esa separación, se ofrece en el lugar del brujo, dando como resultado que Asmodeus le borre todos sus recuerdos acerca de los cazadores de sombras y, por ende, de sus amigos. Además, también le arrebata el vampirismo, por lo que Simon vuelve a ser un mundano normal y corriente. Pese a que Clary, su mejor amiga y nefilim, sabe que lo mejor para él es dejarle vivir su nueva vida tranquilo y que es más seguro que desconozca la existencia del mundo de las sombras, no puede evitar echarle de menos, por lo que entre ella e Isabelle intentan que poco a poco recupere sus recuerdos y, gracias a su insistencia, comienza a tener flashbacks de su existencia como vampiro y de todo lo que experimentó junto a los cazadores de sombras. Aunque no es suficiente, es un comienzo. Magnus también quiere ayudar, dado que gracias a él no se ha quedado atrapado en el infierno, y como su magia no es suficiente para deshacer el hechizo de su padre, le anima a Ascender y convertirse en un cazador de sombras porque eso le permitirá volver a formar parte del mundo de las sombras y, además, puede ayudarle a recuperar todos sus recuerdos. Por otro lado, la Clave perdió a muchos soldados durante la guerra con Sebastian, por lo que ahora mismo está en pleno proceso de búsqueda de nuevos reclutas. Sus deseos de recordar le llevan a aceptar la propuesta de Magnus e ingresar en la Academia de Cazadores de Sombras. Su llegada no dejará indiferente a nadie: todos los alumnos y profesores saben quién es y su historia (algo irónico teniendo en cuenta que él la desconoce) y pronto se convertirá en una celebridad. Sin embargo, por más que su fama le preceda eso no hará que sea fácil integrarse entre los nefilim. al contrario, puesto que las expectativas puestas en él son muy altas; pero la realidad es que Simon nunca ha recibido entrenamiento de ningún tipo y los pocos conocimientos de combate que pudiera tener han desaparecido junto con sus recuerdos, por lo que tendrá que esforzarse el doble para compensar su falta de habilidad y destreza (sobre todo teniendo en cuenta que el resto de sus compañeros han nacido para ser cazadores de sombras y, por tanto, parten con la ventaja de haber sido enseñados y entrenados desde su más tierna infancia). A pesar de las dificultades, Simon conseguirá integrarse en la Academia, hacer amigos y reaprender cómo funciona el mundo al que una vez perteneció. Tales from the Shadowhunter Academy es un conjunto de relatos, que no ha sido traducido al español ni se espera que vaya a ocurrir, escritos por diversos autores en colaboración con Cassandra Clare. Cada relato nos va contando el día a día de Simon en la Academia, las diferentes pruebas y entrenamientos a los que es sometido y cómo estos van mejorando poco a poco sus capacidades en la lucha contra los demonios. Gracias a su instrucción aprendemos más y mejor cómo funcionan los cazadores de sombras (cómo se organizan, sus técnicas de combate, las armas que emplean y cómo las emplean, habilidades etc), su historia y su labor a lo largo de los siglos entre otros muchos datos interesantes, por lo que no solo significa un aprendizaje para el propio Simon, sino también para nosotros como lectores. Son diez relatos que nos muestran sus clases, el hándicap que le supone no recordar nada (y cómo eso entristece a quienes les rodean, especialmente a Isabelle, quien fuera su novia y con quien no puede volver porque ya no la conoce) y además el hecho de que todo el mundo parezca tener unas altas expectativas sobre él, pero no pueda cumplirlas a causa de su situación actual. le costará mucho encajar entre los nefilim porque le consideran inferior por ser un mundano normal y corriente y no proceder de ninguna familia importante, pero enseguida se hará amigo de George Lovelace, un cazador de sombras que también es marginado debido a que los Lovelace decidieron apartarse de la Clave y de la lucha demoniaca para llevar una vida normal. George es abierto, amable y encantador y entiende por lo que está pasando Simon porque él se encuentra en una situación de desprecio similar. Estos relatos son de lo mejor de Cazadores de Sombras. Simon siempre fue uno de mis personajes favoritos, pero tendía a quedarse en un segundo plano porque el protagonismo se lo llevaban Clary y Jace la mayor parte del tiempo, por lo que tener un libro narrado desde su perspectiva era algo que me apetecía leer y no me ha defraudado. He disfrutado muchísimo con esta lectura, no solo porque me encanta Simon, sino porque nos adentramos en sus pensamientos más profundos, en su dolor, sus dudas y su sensación de nunca ser suficiente. No es suficiente para la Academia debido a su origen y a su falta de entrenamiento; no es suficiente para Clary, que quiere de vuelta a su mejor amigo a pesar de que Simon ni siquiera recuerda quién es ella; y tampoco es suficiente para Isabelle, a quien no puede devolverle el mismo amor que ella siente por él porque no recuerda haberla amado. A pesar de que Simon siempre mira las cosas desde un punto humorístico, y estos relatos no han sido la excepción, ha sido desgarrador ver cómo trataba de ser desesperadamente una mejor versión de sí mismo para dejar de decepcionar a todas las personas que le quieren y que esperan que vuelva a ser el Simon de antes. Cada relato nos cuenta un aspecto diferente de su paso por la Academia y contamos con la presencia de otros personajes muy amados de la saga como Tessa Gray, y de otros no tan queridos como Robert Lightwood. Estas apariciones estelares son interesantes porque cada uno de ellos ejerce como profesor en momentos puntuales y tiene una charla con los alumnos, bien contándoles anécdotas de la historia de los nefilim o antiguas peleas para que los futuros cazadores de sombras aprendan de ellas y saquen una lección, o bien para aportar diferentes puntos de vista de los valores que deben encarnar tanto individualmente como comunidad. Intercalar el día a día de Simon entrenando con estas clases más teóricas me ha parecido un acierto, porque así la autora aprovecha para explorar acontecimientos ya ocurridos que hasta ahora desconocíamos. Si bien es una obra compuesta por diez relatos, como todos ellos siguen un orden temporal y el mismo hilo conductor, se siente como si realmente estuvieras leyendo una novela. Y aunque cada relato está coescrito con otro autor, en ningún momento se nota diferencia alguna entre ellos, lo que le da una mayor cohesión al libro. Mi experiencia leyendo Las crónicas de Magnus Bane no fue la mejor porque esa novela sí que es un conjunto salteado de anécdotas que salpican la vida del famoso brujo y mientras que hubo algunos eventos que me resultaron curiosos y divertidos, otros relatos me parecieron bastante flojos y aburridos. Por eso, no iba con ningún tipo de expectativa con respecto a Tales from the Shadowhunter Academy y le lo leí más bien porque era el que me tocaba antes de embarcarme en Lady Midnight y tenía el firme propósito de leerme todo lo que hubiera publicado Cassandra Clare de esta saga. Pero lo cierto es que me enamoré de este libro porque la forma en la que están planificados estos relatos no se parece en nada a lo que ya vimos con Magnus y, como digo, es más bien como leer una novela que nos narra el paso de Simon por la Academia, el cómo deja de ser un simple mundano para convertirse en un verdadero cazador de sombras. Tampoco me vi venir que en el último relato la autora me rompiera el corazón. Soy consciente de que Cassandra Clare es muy dada a conseguir que te encariñes con un personaje y luego hacerle sufrir lo indecible para aplastar el débil corazoncito del lector, pero no imaginaba que tremenda crueldad la llevara incluso a unos relatos. Así que sin comerlo ni beberlo, me vi llorando a lágrima viva mientras repetía en mi cabeza "no" en bucle, leyendo cómo una vez más Cassandra destrozaba mis sentimientos. Mi relato favorito fue Born to Endless Night (yo creo que como el de casi todo el mundo) porque por fin aquí se narra un acontecimiento fundamental en la vida de Alec y Magnus que yo llevaba esperando siglos para poder leerlo, desde que me hiciera hace años un spoiler sin querer (el spoiler más emotivo y motivo que me he hecho nunca, también lo digo). Soy muy pesada diciendo en cada reseña de esta saga que Malec me da la vida y son mis pareja favorita y dos de mis personajes favoritos, por ese orden, así que verlos ser felices hace que me estalle el corazón porque después de todo lo que han sufrido (y de todo lo que seguramente esta señora les hará sufrir en el resto de libros), ya era hora de que tuvieran un poco de paz. Es una lástima que Tales from the Shadowhunter Academy siga sin ser traducido al español, pero si tenéis buen nivel de inglés (o si buscáis directamente la traducción no oficial que fue lo que hice yo cof cof), merece muchísimo la pena que le deis una oportunidad, sobre todo si sois fans de Simon en particular (y de la saga en general). Se ha convertido en uno de mis libros favoritos de Cazadores de Sombras hasta el momento. Es un libro puente entre el final de la saga principal y el inicio de la trilogía de Renacimiento, ya que cuenta cosas que serán importantes para Lady Midnight, pero conociendo a la autora, no creo que sea obligatorio leerlo porque seguramente aquello que sea fundamental para comprender la nueva situación en la que se encuentran los cazadores de sombras en dicha trilogía se explique de forma explícita. Es una de esas obras que lees por el placer de hacerlo y por el amor incondicional que sientes hacia una saga que te ha marcado tanto. Enlace: http://notodoesfantasia.blog.. |
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