Creo que el mensaje que trasmite este libro está mal, pero aún así no he podido parar de leer hasta saber cómo terminaba la trilogía. Se expone a la mujeres como un objeto para ser elegida por el príncipe heredero como su futura esposa, y lo peor es que antes de llegar a ser reina tienen que competir con otras 34 chicas, delante de cámaras que retrasmiten todo lo que ocurre a todo el país. ¿Qué clase de relación se va a conseguir cuando un hombre puede hacer lo que quiera con 35 jóvenes? El amor no puede surgir de una situación así. La autora no ha desarrollado el mundo exterior a las murallas del palacio. El tema de los rebeldes es muy interesante y apenas se habla de ellos, ni de su causa. Tampoco se sabe mucho de las castas en las que está dividida la sociedad. Deja muchas cosas en el aire debido a que ni los propios protagonistas conocen la verdad. Pero tengo que decir que a pesar de todo esto, el libro me ha gustado. Me gusta América pero ninguna de las otras dos esquinas del triángulo amoroso me han dicho mucho, de momento. |