La vida borrada de Amalia Finisterre

He conocido a mucha gente mercadear con el amor, con los sentimientos, como si estos tuvieran un precio, como si formaran parte de un trueque

No se puede amar con medio corazón, como tampoco se puede abrazar con un solo brazo…

Si puedes curar, cura. Si no puedes curar, alivia. Si no puedes aliviar, consuela.

Si uno no se quiere a sí mismo está cerrando la puerta para que amen los demás.

Las emociones - sobre todo cuando son nobles - se confunden con los sentimientos verdaderos, y son estos y no aquellas los que han de prevalecer.

Soñar la vida que nos gustaría vivir, y rebelarnos frente a la vida que nos ha tocado en suerte...¿Acaso existe otra forma de esquivar la derrota?

El problema de muchas preguntas no es que estén faltas de respuesta, sino que son demasiadas las preguntas cuyas respuestas están faltas de esperanza...

Alguien me dijo en cierta ocasión que el amor, cuando es verdadero, te convierte un poco en el otro; y que si no te sientes así, entonces no es el amor el que está actuando sobre ti sino el amor propio, que es algo muy distinto.

Hay sentimientos que no están al alcance de ninguna palabra, de ningún diccionario.