Lo he disfrutado un montón. Me ha enganchado de principio a fin. Elísabet escribe muy bien, con diálogos con mucha chispa e ingenio. Me he reído un montón con los protas y sus ocurrencias; genial de verdad. Además, esas divagaciones de los protas tan filósofas no caen en saco roto y te hacen pensar.
|