Agatha Raisin y la jardinera asesinada

A ver, seamos sinceros: las novelas de Agatha Raisin no son las mejores novelas del mundo y por supuesto que no son perfectas y tienen muchísimos fallos, pero qué te voy a decir: a mí me encantan. Tienen un feeling hogareño y calentito, una especie de volver a casa.

Dicho esto: este libro es, quizá, el más flojo de todos los que he leído hasta ahora, aunque tiene sentido, por supuesto. Es el tercero de la saga, en el que ya conocemos a todos los personajes y la autora puede darse el lujo de explorar más la relación entre Agatha y el resto del pueblo, sobre todo con la gente que tiene más cercana. Aun así, siendo el libro de la longitud que es, me parece que se toma demasiado tiempo en explorar eso y muy poco tiempo en lo que es el caso del libro, que solo es la mitad (o incluso menos) de la longitud del libro.

No tengo problema en que se explore las relaciones de Agatha con su alrededor, sobre todo porque al final el carácter y la relación de Agatha con Mary (la asesinada) es también importante, pero el hecho de que el caso sea solo la mitad del libro hace que el desarrollo, la investigación y las conclusiones resulten algo precipitadas y lo que me gusta de estos libros es a Agatha chospando por todo el campo buscando teorías.

De todas formas, volveré a la saga no tardando; encuentro bastante reconfortante volver a la campiña inglesa con Agatha Raisin y el resto de la chupipandi.