La jugada final

«La jugada final» es la tercera entrega de la serie «Una Herencia en Juego».

Avery Kylie Grambs está a punto de cumplir un año en la mansión Hawthorne y podrá decidir qué hacer con la herencia que le dejó el multimillonario Tobías Hawthorne. Pero antes, tendrá que resolver un nuevo misterio junto a los hermanos Hawthorne y salvar a Toby.
Avery descubrirá el verdadero motivo por el que ‘el viejo' le dejó todo lo que tenía, pero antes de que eso ocurra, la llegada de un visitante inesperado hará que la tensión aumente entre ella y Grayson, mientras que su relación con Jameson avanza hacia un futuro incierto.
Avery tendrá que ir a por todas y jugar a ese juego... si quiere sobrevivir.


«La jugada final» me hizo experimentar grandes momentos de tensión. Como ya dije, Jennifer Lynn Barnes me atrapó desde la primera línea de «Una herencia en Juego» y cada entrega me sumerge en el mundo de los Hawthorne.
A la mayoría de las personas que conozco no le gustan los triángulos amorosos —y menos aún si implica a familiares—, pero tengo que decir que, pese a que el romance no es ni un 10 % de los libros, la relación entre Avery, Grayson y Jameson me ha tenido en vilo. Me he desesperado, pero me ha encantado el sentimiento de contradicción de preferir a uno y a otro, dependiendo de la situación.
L. Barnes concluye maravillosamente la historia de Avery, aunque una vez dentro de este mundo, todo parece poco. Habrá que ver como continúa la historia de los protagonistas en la siguiente entrega, «Los hermanos Hawthorne», que protagonizan Grayson y Jameson y donde seguro que veremos al resto de los personajes, especialmente a Avery.