 |
Falta poco para que se cumpla un año de la llegada de Avery a la mansión Hawthorne y para que se convierta oficialmente en multimillonaria. Pero, por supuesto, todavía nos espera una última partida. La historia me ha gustado un montón pero confieso que no ha conseguido atraparme del todo como los anteriores. Con los otros no podía dejar de leer y con este paraba sin problema. Se sigue leyendo muy rápido porque los capítulos son cortitos y se llevan genial, la verdad. Aunque, como he dicho, la historia me ha gustado, con todos sus acertijos y demás, no me ha sorprendido demasiado y el tema romance es lo que peor he llevado. Demasiadas inseguridades que me ponían nerviosa y, aunque fuesen habladas (que es algo que agradecí) no llegaban a buen puerto porque algún personaje no se lo quería creer. Por suerte, me gustó bastante el final y el “destino” de cada uno. Es una trilogía genial para cuando quieras leer algo diferente, lleno de acertijos y que sea muy ligero. |
>
