Los crímenes de la carretera

Cuando terminé la trilogía de “El cuarto mono” ya tenía claro que tenía que seguir leyendo a este autor.
Este libro está escrito a cuatro manos junto a James Petterson. Y ha sido un tándem perfecto.

Un thriller psicológico, con capítulos cortos, con descripciones en su justa medida y un buen ritmo hace que el libro me durara un suspiro.
La trama está llena de giros que te dejan con la boca abierta, con mucha acción (en mi opinión demasiada acción) y de nuevo con unos personajes impactantes.

Tengo que reconocer que me gustó mucho más la trilogía anterior, posiblemente por lo que os he comentado, hay mucha acción y esa parte se me ha hecho un poco pesada.