Los crímenes de la carretera

Una novela criminal atrevida, rápida, con unos giros muy buenos y retorcidos, y un elenco de personajes variopintos que han hecho que se posicione en mi top de este año.
Para mí ha tenido tantas cosas buenas del género que es imposible no disfrutarla.

Una investigación criminal minuciosa, con mucho toque de película y mucha acción sobre el terreno, incluyendo al FBI.

Un criminal, Michael, con una personalidad muy marcada, definida por su vida, sus motivaciones, y sus raíces socioculturales. Adoro cuando me gustan los malos.

Buen ritmo, ascendente, con una trama que va dando vueltas de tuerca, tiene la velocidad de un Ferrari, aunque en algunas curvas te puedes marear. Llegando al final no pisa el freno, y que final, no me lo esperaba. Hay bastantes diálogos y los capítulos son cortos, narrados por diferentes personajes, lo que te permite obtener una visión más amplia de la historia.

Que tienes clichés, si, tópicos también, pero si están bien usados a mí no me molestan.

¿Consejo? No la comparéis ni esperéis encontraros una secuela del cuarto mono, así la disfrutaréis más. Es una novela diferente, escrita a cuatro manos, pero bastante adictiva. Muy recomendada por mi parte.