Este libro es como un abrazo caliente al corazón. Lo que empieza como la historia de un viejo gruñón enfadado con todo y con todos se convierte en una historia de compresión, ayuda y amor. Y, especialmente, de como hay muchas formas de demostrar amor, y de como (a veces) no sabemos mostrarlo de la mejor manera, o de la manera que entienden los demás. No sé, no me esperaba que me fuera a gustar tanto, la verdad.
|