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La autora Anissa nos trae una historia desgarradora, donde nuestra protagonista esta inversa en un dolor y un sufrimiento profundo; se niega admitirlo, refugiándose en el ballet. Ojalá pudiera volver al pasado y que todo fuera tan distinto, pero el dolor la consume. Los acontecimientos se suceden muy deprisa, decisiones importantes que tomar, un dolor que superar y un amor llamando a su puerta. Ese amor le cambiará la vida, le dará fuerzas para superar cosas que ni ella imagina y sobre todo a ser dueña de su vida. Es una novela romántica, pero sobre todo de superación, mezcla demasiado bien las dos partes, lo que para mí hace que sea una novela preciosa. Desde un principio te atrapa, la narrativa es fluida y la capacidad de empatizar con los personajes es increíble. Crea su propio clima, te hace sentir parte de su historia. La trama es algo predecible, es cierto que algún giro me pilló de sorpresa, pero en líneas generales es lo que me esperaba. Se adapta perfectamente a su género, supera con creces todo lo que te puedas esperar. Mi opinión personal se resume a una sola palabra, sublime. Adoro este género, pero esta historia ha sido increíble, la manera de contarlo, de sacar sentimientos, de hacerme vibrar. Reconozco que he llorado y en muchos momentos he tenido un nudo en la garganta, es una novela muy especial, la perdida de alguien no es fácil y superar un duelo tampoco; su manera de conseguir escribir eso es lo que más me ha tocado. Tiene frases increíbles y no me puedo resistir a poneros algunas “Temía que el mundo la olvidara y yo temía olvidarme del mundo”, “De repente, descubres que aún puedes sonreír, incluso soñar, sin sentirte culpable por ello”. Os recomiendo esta novela, que podáis sentir como las letras se apoderan de vosotros, te abrazan y te susurran esta bonita historia. |
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