La reina roja

Reseña de 2016:

Hace tiempo que oí por primera vez sobre La Reina Roja. La sinopsis parecía atrapante, prometía demasiado y tenía una portada maravillosa. Pasó un tiempo y comenzó el fenómeno. Estaba en todos lados, llegó al país y quise leerlo para sacar mis propias conclusiones. No voy a hablar más hasta pasadas unas cuantas palabras en esta reseña.

La historia, a pesar de parecer compleja por la sinopsis que presenta, es sumamente sencilla, fácil de entender, de seguir. Tan sencilla y fácil es que llega un punto en el que se vuelve sosa e insípida. En resumidas cuentas tenemos a Mare Barrow, una joven ladrona de sangre roja que cuenta los días para caer en el ejército como todos sus hermanos mayores; su hermana Gisa es la única de la familia que logró ser aprendiz y tener la posibilidad de conseguir un empleo pero esta posibilidad se ve truncada cuando Mare trata de llevar a cabo un plan para huir, para evitar el reclutamiento.

El mundo que Aveyard nos presenta es bastante difuso. No hay descripciones sobre el tiempo y el espacio en el que está desarrollándose, lo cual es bastante decadente por el simple hecho de no saber dónde estamos parados. Sabemos que la ciudad de ella se llama Los Pilares, tenemos algún que otro dato suelto y listo. No sabemos si esto ocurre en un futuro lejano, si es fantasía épica, si esto sucede entremedio, si es todo un mundo ficticio o si hay algo de realidad en él. ¡Nada! Y es exasperante porque hay varios avances tecnológicos pero también hay elementos de la edad media, y no sabés cómo imaginar el lugar, la ropa, nada. Tampoco se gasta en descripciones ni de espacio, ni de los personajes, ni siquiera de la historia de este mundo extraño.

Los que me conocen saben que soy quisquillosa y que desde que entré a la facultad, estoy más pesada pero la verdad es que este libro podría haber sido buenísimo, podría haber sido de mis favoritos, lo tenía todo pero falló.

Con el correr de las páginas fui sintiendo que estaba frente a un patchwork de distintas obras del género. Había diálogos muy similares a Los Juegos del Hambre, situaciones parecidas a las de la Selección, varias cosas de Trono de Cristal... Repito. Estaba frente a un collage de obras, más que mal hecho. Tuve constantemente ese sentimiento de esto ya lo leí antes.

Otra cosa que me molestó muchísimo fue esa comparación bastante pobre de plateados y Dioses. Soy de esas personas fanáticas de la mitología, de esos fanáticos que te cortan un dedo si es necesario por lo que esa comparación e incluso la descripción errónea de los dioses, me sacó de mis casillas. Es algo que no tiene ni pies ni cabeza si no está describiendo cómo son los dioses que forman parte de este mundo ni nada por el estilo, por esa razón me apego a mis conocimientos.

Los personajes principales no están bien construidos, no tienen una personalidad estable ni miras de evolución. En cambio, los personajes secundarios son los que salvan la historia. Me parece una lástima que la autora no haya reparado un poco más en ellos. Mare Barrow, la protagonista y narradora de la historia, al principio me caía bien. Su egoísmo, su forma de estar parada y de rebuscarse la vida me parecían un poco diferente a lo que estaba acostumbrada a leer pero con el pasar del tiempo me comenzó a caer mal. Se contradecía todo el tiempo, las acciones que llevaba a cabo eran totalmente diferentes a las que decía que iba a hacer, estaba frente a dos posibilidades y lo único que hacía era suspirar como una puberta frente a los dos príncipes. La verdad, Mare Barrow me decepcionó. En cuanto a los dos príncipes, no puedo hablar mucho sin caer en spoilers. Me gustaban los dos, tenía preferencia por uno pero con el tiempo me cayeron mal los dos. Así de simple.
Es la constante de nuestra especie. Sea cual fuere el color de su sangre, el hombre caerá siempre.
La trama y los giros argumentativos me resultaron sumamente predecibles. Incluso logró aburrirme en varias ocasiones. No me sorprendió en ningún momento lo mismo que el final, el cual me hubiera gustado más sin el epílogo. Si lo leyeron o lo leerán, ya entenderán por qué.

Lo único que me gustó de toda la historia fueron las escenas donde aparecían las habilidades de los plateados, las batallas y los entrenamientos. También los capítulos donde tenía presencia Julian por sus conocimientos, sus enseñanzas y su forma de ser.

A pesar de no gustarme lo suficiente, recomiendo este libro a quién le guste el género y a quién poco le importe todo lo que expresé arriba.
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