Sentido y sensibilidad

Jane Austen tiene para mi una manera de narrar única, imprime en sus diálogos una elegancia, sin necesidad de recurrir a lenguaje poco común, a pesar de escribir en tercera persona, logra hacernos acercar profundamente a sus personajes, tiene un humor fino para exponer costumbres y comportamientos propios de la época sin qué con ello nos haga alejarnos de la trama principal, por el contrario, al menos yo siento que vivo ese momento, que estoy allí presente con los personajes y la situación; no necesita ser demasiado detallada en la ambientación y descripción de lugares, para hacérnoslo ver con toda claridad. Esta es la cuarta obra de Jane qué leo, la única que me costó trabajo para conectar fue Emma, pero en las otras tres mis sensaciones y emoción es la misma; mi favorita sigue siendo Persuasion, porque me siento más cercana a Anne, pero en los tres libros que me gustaron, me sumergí en la época y en sus historias de manera maravillosa y soñadora. En Sentido y Sensibilidad, el único pero que encontré es el final tan acelerado y narrado desde la distancia de Marianne,aunque el final en si mismo tanto de Elinor como de Marinne son redondos, completos y adecuados... Como todos los finales qué he leído de las mujeres de Jane Austen.