Os diré sobre este clásico imprescindible de la literatura inglesa que, al principio, me pareció un poco aburrido si no contamos las intervenciones del Sr. Bennet que es el personaje más divertido de todos. A medida que avanzaba en la lectura, y sin ser ésta un constante flujo de sorpresas y emociones, me atrapó. Me atrapó por su sencillez, por su marco, por el modo de vida que tienen sus personajes, por los personajes mismos. Cada vez que paraba la lectura no podía pensar más que en volver allí, con ellos. Mientras permanecía en aquel lugar era como si me sintiera en paz. Me ha cautivado este libro, sobre todo, Elizabeth y Mr. Darcy. Es el primer libro en mucho tiempo que me hace sentir un vacío al terminarlo. Un vacío de esos que se sienten cuando has estado tan dentro de una historia que, cuando lo terminas, el sentimiento de pérdida es irremediable. Si me preguntáis si lo recomiendo la respuesta es ¡Sí! No le doy las 5 estrellas porque me quedo sin beso final! |