Austen siempre es Austen, pero tenía razón: con Emma creó un personaje que, al menos a mí, me resulta odioso. El problema es que Knightley me resulta insustancial y la mejor parte de la historia son, en este caso, los secundarios. Efectivamente es mi Austen menos favorito y recomendaría dejarlo para el final, cuando ya la autora nos haya robado el corazón con otras historias. |