Tengo que admitir que tengo sentimientos divididos. Es que esperaba tanto este libro por la naturaleza de sus personajes, Kay y Nera... Posiblemente el chico más inestable y perturbador psicológicamente que Neva ha creado y la única mujer que lidera en la Cosa Nostra. La construcción del libro esta genial, como se conocen, las circunstancias que los rodean y los conflictos pero odie el equilibro que tuvo... Me encanta Kai, ya sabemos que me pierden los personajes totalmente grises, su forma de ver a Nera y lo que hacía a oscuras para cuidarla teniendo tan pocas herramientas emocionales, que lo único que podía darle era su protección y su experiencia como asesino. Nera es una protagonista totalmente nueva también, no me pareció como las demás. Llena de amor, fuego, y valentía en un mundo sucio. Y eso es lo bueno de Neva, esa capacidad para reinventarse. Y ahora el pero. Me hubiera gustado menos relleno al inicio de la relación, más escenas de interacción directa y una resolución del conflicto que se pudiera leer, y no “dos meses después”, “un año después”, “tres semanas después”... Solo lagunas mentales . Al final sentí que todo sucedió muy acelerado... por no hablar que no se ve nada del rescate por parte de Az y Sergei como se pudo ver en el libro 7. Llega un punto que desconoces al personaje de Kai, y me resultó contradictorio. Me entretuvo mucho y lo he disfrutado, pero teniendo 400 páginas hubiera esperado mayor tensión, suspense y erotismo. Ahora ya estoy deseando que llegue julio para conocer el legado de la saga, ya que llega la segunda generación antes del próximo libro en diciembre. + Leer más |