Una pintura, con paisaje otoñal lúgubre y con huellas de pisadas de dos viajeros, dispara la memoria del narrador y personaje de esta historia, quien aclara que va a narrar la historia de ese cuadro. La acción está situada en Talas, Kirguistán. El narrador, Seit, un adolescente perteneciente a una tribu nómade, relata que su familia y su pueblo solía ser nómade pero luego pasan a vivir colectivamente en aldeas. al estallar la segunda guerra mundial, sus hermanos van al frente a luchar. Su padre es carpintero pero quien manda en la casa es su madrastra, una buena mujer que trabaja duro para mantener a las dos familias unidas y a quien los miembros de la tribu respetan más que a su esposo. Su pueblo tiene tradiciones que se respetan. Su madrastra era su tía, al quedar viuda se casó con el hermano del fallecido como manda la costumbre de su pueblo. Jamila es la cuñada del narrador, es la esposa de uno de sus hermanos que lucha en el frente de batalla. Allí todos trabajan incluso las niñas. La vida y el trabajo se da de manera colectiva. Todos trabajan en el campo durante la época de cosecha, que es la más difícil. Los problemas surgen cuando, ante la falta de hombres, el jefe del equipo de la cosecha pretende que Jamila haga las entregas de los granos. Pero su suegra se resiste a que una mujer haga ese tipo de trabajo y se exponga a cualquier abuso por parte de otras personas. Jamila tiene una personalidad que atrae. Ella es como una niña, tiene mucha energía aún después de trabajar duro. Físicamente bonita. Abraza y besa a su familia y siempre está de buen humor para cantar. Nunca duda en hacerse respetar. Cuando su esposo escribe cartas, éstas van dirigidas al padre. En ellas expresa sus buenos deseos de salud y bienestar general para toda la tribu. La carta apenas contiene un saludo final para su esposa. Así lo manda la costumbre de su tribu. De repente aparece Daniyar, un soldado herido que llega a la aldea de Seit. Pero Daniyar no es un desconocido, ya que de niño pertenecía a esa tribu Sin embargo, al quedar huérfano, nadie lo reclamó y fue a parar a otra tribu donde pasó momentos feos. Ahora retornaba a su lugar de origen. Daniyar era muy callado y siempre abstraído. Con la llegada de Daniyar lapersonalidad de Jamila cambió. Ya no era divertida ni desafiante ni frontal sino apagada, silenciosa y esquiva, especialmente con Daniyar. Seit es testigo del floreciente amor entre Jamila y Daniyar. El testimonio de ese amor es la pintura de los enamorados huyendo que él mismo realizó. + Leer más |