El mundo en mapas

Gracias a la gentileza de la editorial Susaeta y a Masa Crítica de Babelio, tengo en mis manos (y me hacen falta las dos, porque es un libro de gran formato) "El mundo en mapas", ilustrado por Dario Cali. El planteamiento del libro es formalmente idéntico al del "Atlas del mundo", de Aleksandra Mizielinska y Daniel Mizielinski, del año 2015. al igual que en aquella obra, se trata de un atlas visual para los más jóvenes donde se suceden mapas a doble página y miniaturas ilustrando aspectos representativos de cada región del mundo. Aquel era un libro más completo que este, que se queda en un nivel más básico.

Las ilustraciones son sencillas y a la vez atractivas, siendo el punto fuerte del libro. Por las características de este tipo de atlas, la mayoría de los datos que se muestran son escuetos, ya que se trata de una guía introductoria para que los niños investiguen a partir de ella, y se interesen por el mundo físico en que vivimos. Descubrir el mundo a través de la Geografía de niño es plantar la semilla de una fascinación que perdura toda la vida. En ese sentido el libro es bueno, y cumple con su objetivo. Y para que negarlo: en la era de internet los más viejunos siempre agradecemos tener en casa un libro en papel lleno mapas.

"El mundo en mapas" ofrece un viaje cautivador presentando un festín visual que abarca todos los continentes. Cortesía de la editorial Susaeta y Masa Crítica de Babelio, este libro de gran formato ilustrado por Dario Cali, se erige como un atlas visual que va más allá de la geografía básica. La sinopsis promete un recorrido detallado por países, banderas y costumbres, y la obra cumple con creces esa promesa.

Sus páginas despliegan mapas que a través de sus ilustraciones nos revelan datos esenciales de los diferentes países. La sencillez de dichas ilustraciones sirven como reflejo fiel de los tesoros que nuestro planeta alberga. Dicha sencillez se alinea perfectamente con la naturaleza del libro, diseñado para incitar la curiosidad de los niños y motivarlos a explorar el fascinante mundo que les rodea. No obstante, esta simplicidad de los datos presentados no es en sí una limitación, sino más bien una invitación a la exploración y al descubrimiento autónomo.

Con sus encantadoras ilustraciones y su enfoque accesible, en una época donde la información está a un clic de distancia, este atlas destaca como un tesoro tangible, una invitación a explorar las páginas llenas de vida que revelan la diversidad y riqueza de nuestro planeta, llegando a ser una valiosa adición a cualquier biblioteca destinada a inspirar futuros exploradores.

Gracias a la editorial Susaeta por enviarme este ejemplar a través de la iniciativa de Masa Crítica.
Se trata de un atlas que, por medio de ilustraciones, descubre a los más pequeños ciertos datos curiosos sobre los países.
Dividido por continentes, detalla información sobre costumbres, población o las banderas de cada país.
Un libro atractivo con el que ir despertando la curiosidad de los más jóvenes de la casa que, de una manera muy visual, pueden ir recopilando detalles de muchos de los lugares que les llaman la atención