Tomando dos relatos propios, Cornell Woolrich, - que también publicó clásicos del género con el seudónimo de William Irish - , nos presenta una novela que, además, fue llevada al cine en 1946. Narrada en primera persona, nos encontramos con una entretenida obra que retoma algo recurrente en el autor: cómo una persona común se ve afrontando una historia criminal, la que afectará su vida , y la de otros. Vemos así, a medida que pasamos las páginas, y en forma de episodios, un relato hecho de subjetividades, que nos presenta un mundo oscuro y peligroso, muy en blanco y negro, al mejor estilo noir. Una joven mujer decide encarar a la que, supone, es amante de su esposo. al llegar la encuentra asesinada. Poco después, él es acusado del crimen, juzgado, condenado, y sentenciado a muerte. Desesperada por salvarlo, confiando en su inocencia, decide alternar, - escondiendo su identidad - , entre los antiguos allegados de la víctima, - una femme fatale con todas las de la ley - , para dar con el culpable. Comienza así una incursión en un ambiente que no le es propio, - en muchos sentidos, casi como un descenso al infierno -, donde vivirá diversas situaciones que afectarán su cosmovisión y sus sentimientos y donde, en más de una ocasión, pondrá su vida en peligro. En definitiva, una muy buena opción de lectura que, los amantes del noir de los 30 y 40, sin duda, disfrutarán. + Leer más |