Un descubrimiento en toda regla este Violín de Goebbels primera novela de Yoann Iacono donde seguiremos la vida de la violinista japonesa Nejiko Suwa a partir del regalo de un Stradivarius que le hace Joseph Goebbels como ofrenda al hermanamiento germano-japonés antes del inicio de la 2ª GM. La historia narrada desde la perspectiva de una persona (mantendremos el misterio) que conocía anteriormente a la propia Suwa y que recibe de ella los cuadernos donde durante décadas ha escrito su diario. A partir de estos diarios el autor sabe manejar a la perfección la historia, utilizando diferentes registros como los propios diarios, utilizando al propio narrador para dar más detalles que él conocía de la violinista, así como información más genérica de los sucesos históricos que iban rodeando sus vivencias. La narración en todo momento es rápida, sin ser trepidante, consigue que el personaje de Suwa atrape desde un primer momento y genere el misterio suficiente para saber que fue de ella y del violín, con alguna que otra sorpresa inesperada. El autor consigue que nos traslademos a esa época, que parece que él mismo la viviera a través del alter ego del narrador-investigador y nos va mostrando la evolución personal y emocional de Suwa, pero que al mismo tiempo es capaz de hacerse preguntas incómodas que quedan trasladadas al lector. Durante la narración podremos vivir que aunque el mundo estaba en guerra, seguían habiendo conciertos por los auditorios más importantes de Europa, la relación de los músicos más importantes del momento con las autoridades nazis y las tensiones que podía llegar a generar todo esto con las altas esferas. Los personajes secundarios a parte del propio narrador son tanto de ficción como históricos pero no tienen excesivo peso específico en la trama de la obra. Una historia con la que recorremos una de aquellas partes de la historia de la 2ª GM y de la primera mitad del siglo XX menos conocidas, que han quedado sepultadas por tantos y tantos hechos históricos más importantes, pero como se dice muchas veces la pequeña historia es la que forma la historia que todos vivimos. Una historia personificada en una violinista pero que del particular quiere hacer recuerdo sobre el robo de millares de instrumentos musicales, partituras y otros elementos del mundo musical que quedo mucho más oculto que otros de similares como las obras de arte de los que se ha escrito y filmado mucho más. Estamos frente de uno de esos libros altamente recomendables, que nos muestra una parte de la historia pero sin ser un libro de una carga histórica abrumadora, más bien lo contrario, una fino velo que va acompañando una historia real, llena de humanidad y de preguntas, valga la redundancia muy humanas y certeras. Enlace: https://www.instagram.com/p/.. + Leer más |