No salgas de noche de Stacy Willingham
Porque eso es lo que hace el peligro: lo intensifica todo. Los latidos de tu corazón, los sentidos, el tacto. Es un deseo de sentirse vivo, porque es imposible sentirse de otro modo que no sea vivo cuando te encuentras en presencia del peligro, el mundo se cubre de una neblina sombría y su mera existencia es toda la prueba que necesitas de que estás aquí, de que respiras. Y de que, en un instante, todo podría desaparecer. |