Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
Ojalá le hiciera más caso a mi cerebro, parece un tipo listo, pese a que no hablemos demasiado.
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Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
Ojalá le hiciera más caso a mi cerebro, parece un tipo listo, pese a que no hablemos demasiado.
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Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
"-Yo también me siento muy yo cuando estoy contigo. -Eres tan tú que creo que no te cabría ser otra cosa bu aunque lo intentaras. " |
Hellfriend de Myriam M. Lejardi
-¿No te parece horrible que sean las personas que no nos conocen las que juzguen nuestras rarezas?
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Hellfriend de Myriam M. Lejardi
-Solo os aferráis a la vida cuando se acaba, sin daros cuenta de que lleva acabándose desde que nacéis. Y es así para que podáis disfrutar de ella. La eternidad no se disfruta, se tolera.
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Hellfriend de Myriam M. Lejardi
Decido que la humanidad es justo esto. Hacerlo lo mejor que se puede con lo que se tiene, con la esperanza de que sea perfecto y el consuelo de que al menos se ha intentado. Disfrutando de cada uno de los segundos por si da la casualidad de que alguno de ellos es el último.
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Hellfriend de Myriam M. Lejardi
La sonrisa ha vuelto, solo que multiplicada por mil. El gesto la transforma, iluminando la mejor que cualquiera de los focos que hay por aquí. Es un grito ("¡Soy feliz!") y una promesa ("Te pasarás lo que te queda de existencia intentando que vuelva a esbozar la"). Es una descarga eléctrica que me recorre los nervios y me paralizalos músculos. Es... Quiero moderla y guardarla y besarla
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Tres son multitud de Myriam M. Lejardi
—¿Por qué quieres ser músico? […] —Porque no me imagino haciendo otra cosa. Sería capaz, claro. Pero no quiero, no puedo. Es lo que soy. —Entonces da un paso y después el siguiente. Avanza. Es imposible perderse en un camino que solo tiene un final. |
Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
«Te sigo odiando, pero deja la lengua quieta o úsala para algo de provecho, por favor, te lo pido».
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Prende fuego a la noche de Myriam M. Lejardi
—(…) Desde su casa, solo son quince minutos andando hasta el 666. —Qué nombre más horrible. —¿Y cómo llamarías tú a un nido de vampiros, Bibi? ¿La Taberna de la tía Paqui? |
Del amor y otras pandemias de Myriam M. Lejardi
Al final, si pasa, podemos decirnos a nosotros mismos que ojalá hubiéramos parado antes de hacernos tanto daño. |
Hellfriend de Myriam M. Lejardi
La esperanza te impide asumir la realidad y sanar. Derrite cualquier escudo que interpongas entre tu corazón y las consecuencias, dejándolo indefenso al daño. Es una cama elástica en la que saltas cada vez más alto, que te hace creer que eres capaz de volar. Hasta que se rompe y te estampas contra el suelo.
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Hellfriend de Myriam M. Lejardi
Odio ese concepto. «Merecer». Da igual lo bien o lo mal que hagas las cosas, rara vez obtienes lo que mereces. Hay gente que la caga a conciencia, que disfruta con ello, a la que la vida le va estupendamente. Y justo al contrario. El karma no existe. Así que mi consejo es el siguiente: haz lo que te dé la gana para sentirte bien contigo mismo, sin pensar en la opinión que tendrá el resto del mundo sobre ello.
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Hellfriend de Myriam M. Lejardi
Sé cómo son tus sueños, y también tus pesadillas, ¿cuáles quieres que empiece a cumplir?
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Prende fuego a la noche de Myriam M. Lejardi
Lo malo de dejar que otro decida es que, durante el tiempo que necesita para llegar a una resolución, te das cuenta de lo que deseas que diga y te acongoja que no lo haga.
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Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
No entendía porque tenía tanto miedo de contártelo. A mí no me habría acojonado hablar de algo así con mi madre. Pero claro, ella no me habría hecho sentir culpable por no ser feliz
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Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
Equivocarse siempre es una opción. Sin embargo, si no te das la oportunidad de pifiarla, hay pocas probabilidades de que te topes con algo que de verdad te motive.
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Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
Me mira con ojos de cordero degollado y me pregunta: — ¿Por qué no se quieren? —Tío, es un cómic porno. |
Cómo (no) enamorarse de Myriam M. Lejardi
Cuando abro la puerta de la habitación de mi madre y me la encuentro desnuda en la cama, encima de su mejor amiga, me sorprendo un poco.
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Gregorio Samsa es un ...