La historia está ambientada en una época que tenemos todos muy reciente, la pandemia, y en este caso, en el confinamiento. Elena está hecha polvo porque su novio de toda la vida, Luis, ese que la propuso matrimonio y lo gritó a las cuatro vientos, siente que no necesitan un papel para ser felices y decide por los dos que es mejor seguir como están. Ella no cree lo mismo, es más de o todo o nada y decide ponerle las maletas en la calle y dar por finalizada su relación. Aris es un nuevo inquilino que acaba de llegar al vecindario, concretamente al quinto. Llega intentando comenzar una nueva vida después de unos años complicados. Cuando la cosa se pone fea y los confinan, se conocerán poco a poco, e irán dejando mostrar sus sentimientos. No quiero contaros mucho más porque no quiero haceros spoiler, pero es una novela divertida (el hermano de Elena, Alonso tiene ocurrencias muy divertidas), con episodios que vivimos en el confinamiento, y sobre todo una historia bonita de amor detrás de todo ello. Me ha encantado el personaje de Aris, que a pesar de lo borde y antipática que es Elena con él, no se rinde. Le muestra todas sus cartas, y decide ser sincero con ella, y por tanto, se ha ganado mi cariño. No conocía la pluma de la autora, pero me ha parecido muy sencilla y ágil, por lo que me he leído el libro casi sin darme cuenta. + Leer más |