El dragón de jade de Julio Santos García
—Debo confesaros una cosa que no saben los periódicos —dijo—. Por las noches, seguimos oyendo extraños ruidos en el museo que no conseguimos localizar. El dragón tiene que estar aquí dentro, pero desde que cerramos la puerta el otro día, hemos puesto patas arriba el museo revisando cada rincón y no hemos encontrado nada —explicó—. [...]
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