El muro de Berlín fue construido en 1961 para impedir el éxodo de ciudadanos de la República Democrática Alemana al sector aliado de la ciudad. Muchos fueron los intentos frustrados de atravesarlo y quienes lo intentaron lo pagaron con la cárcel, e incluso con su vida. Pero en el verano de 1962 un grupo de alumnos de ingeniería, liderados por el joven Joachim Rudolph, lograron cavar una galería de 135 metros de longitud entre una fábrica en el oeste y el sótano de un edificio abandonado en el este. Un plan que parecía desafiar tanto a la sensatez como a la geografía y que ni la Stasi ni todos sus agentes infiltrados pudieron impedir. La autora ha creado un emocionante relato de amores, lealtades y traiciones donde nos cuenta de manera casi novelada, no solo las peripecias de este grupo de alemanes del Este, sino también la vida en el Berlín Oriental después de la IIGM, pues la historia empieza con la llegada del ejército rojo a Berlín y termina con la caída del Muro. Se nota que Merriman es periodista porque el libro está escrito con un estilo sencillo, sin florituras literarias. Cuenta tantas cosas y lo trasmite tan bien que parece que lo estes viviendo en directo: el sometimiento, el miedo, las torturas psicológicas de la Stasi o los diversos intentos de huida. Y es comprensible, al fin y al cabo, este libro es el resultado de incontables horas de entrevistas con los supervivientes y miles de documentos provenientes de los archivos de la misma Stasi. De verdad, es que un relato que tiene todos, todos, toditos todos los ingredientes de una novela adictiva: ritmo trepidante, tensión, protagonistas carismáticos... lo dicho, todos... salvo por una cosa... y es que es no es una novela, es una historia real, de esas donde la realidad es más increíble que la ficción, y es lo que la hace más emocionante. Recomendadísimo para los amantes del género. Diré que es el libro de los que haya leído que mejor describe la época, me ha encantado. . + Leer más |