La guerra de los mundos de H.G. Wells
Los marcianos serán una bendición para ellos. Bonitas jaulas, bien aireadas; alimentos de primera; nada de preocupaciones. Después de una semana de andar corriendo por los campos sin nada de comer, irán por su propia voluntad a que los capturen. Al cabo de un tiempo estarán contentos y se preguntarán qué hacía la gente antes de que los marcianos se hicieran cargo de las cosas.
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