Cuentos de Navidad y Reyes de Emilia Pardo Bazán
-Mamá, ¿soy yo mala? -gemía la inocente. -No, eres muy buena, muy buena. -Entonces, ¿por qué me castiga Dios? -No es castigo... -sollozaba la madre-. Es que después, cuando te mejores, has de disfrutar mucho... y es que ahora, si es verdad que estás malita, también tienes más cosas bonitas que las otras niñas, más muñecas, más juguetes, más flores, unas cajas preciosas... |