Cerca del corazón salvaje de Clarice Lispector
El fin de la lucidez de Juana se mezcló con el navío escorado sobre las olas moviéndose. Bastaba mover la cabeza para que las olas la acompañaran. Pero ella había tenido algo, lo había tenido. Un marido, senos, un amante, una casa, libros, cabellos cortados, una tía, un profesor.
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