Una serie de asesinatos que en principio no guardan relación entre ellos, acaba por unir a tres personas dispares muy relacionadas con los asesinados y principales sospechosos de lo que se empieza a conocer como víctimas del «asesino de los monumentos». Viajaremos por toda España con los protagonistas, el inspector Diego Blanco, Pierre Laserre y Alba Rubio en una fuga constante y al mismo tiempo comenzar una investigación para atrapar al asesino que pasa en principio por dar con la relación que pueden tener entre ellos y cuál es la causa de que sus familiares hayan sido objetivo del maniaco antes de ser ellos mismos víctimas o prisioneros. Interesante novela de misterio con constantes giros y cada página nos encontramos con sorpresas y secretos imprevistos. Tenemos también pinceladas de una historia antigua que parece bien documentada y de la que no voy a comentar nada para no dar muchas pistas sobre todo lo que va aconteciendo. Como todo libro de este estilo, nada ni nadie es lo que parece. |