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Si bien el final del libro me ha resultado un poco "excesivo" y me ha fallado un pequeño detalle "médico" (pero que permite rematar muy bien la novela), es un libro que te atrapa con dos voces narrativas. Un tercera persona que nos narra lo relativo a los habitantes de Muerdealmas y una segunda persona del singular y del plural para el personaje principal de la historia, lo que hace que veas esta desde dentro. La cuarta estrella se la gana el uso de esa segunda persona verbal.
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