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En 1891 se produjo una epidemia de cólera en Italia. El cadáver de la última víctima, una niña de seis años, desaparece de la morgue misteriosamente. Diecisiete años después nos encontramos en Venecia, donde conocemos a Mario y Andrea, dos hermanos que regentan la juguetería Ca'Corsini. Cuando un día, en una casa muy cercana a la de ellos, se instala la familia Montalbano, compuesta por el padre y su hija, Silvana, también jugueteros. Los hermanos Corsini no tardan en preocuparse por la competencia, pues los nuevos vecinos cuentan con unos autómatas de mucha más calidad que tienen conquistada a toda Venecia... Me cuesta mucho catalogar esta historia por género, porque es un combo de romance, terror, toques góticos y de steampunk e intriga. Aunque era evidente todo lo que había detrás de los asesinatos que van sucediendo durante todo el libro, no esperaba ese final. Un final que me puso los pelos de punta y me hizo imaginarme a mí ahí, traumatizándome para el resto de mi vida. Algo que quiero destacar es la edición tan preciosa del libro; la portada enamora pero es que por dentro continúa haciéndolo con esas ilustraciones de Venecia que consiguen que entres todavía más en la historia. Me ha gustado mucho y como ya dije con La voz de Amunet, pienso continuar leyendo más libros de esta autora porque me tiene completamente fascinada. |
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