La clave de Agatha

En un universo bien despachado de disfunciones mentales, llamémoslo «pasado cercano», vive una hija con mucha vista, una madre con mucha cabeza y un amigo con mucho corazón.
En el mismo universo (y esto es un destripe), siglo atrás, una famosa escritora huye para proteger un objeto poderoso.

Lo primero a destacar es lo bien escrita que está la obra. En lo que se lee y, en lo que no: adjetivos afinados, bien puestos (nada de anticipación o duplicidad), libre de expresiones manidas o redundancias sin sentido.. Buena parte de la fuerza de la novela está en el cómo. Estamos ante una novela con una labor post borrador magnífica.

Lo segundo es de género: aventuras con chispa sobrenatural. Si no fuera porque el toque fantástico es dovela clave parecería más condimento que ingrediente. En el libro lo inexplicable detona y cataliza, pero son unos personajes, entidades únicas en una dinámica previa que los hace friccionar con cada vuelta, los que rompen y resuelven para abrirse paso hacia la sorpresa final.

Lo tercero, y esto es algo que valoro mucho, quiero mencionar la ambientación: ya sea en España como en Inglaterra, en interiores o exteriores; los párrafos consiguen evocar tanto el espacio físico como el psicológico. Esto lo logra (como ya he mencionado) sin gongorismos, enfocando toda la energía literaria en materializar los escenarios como son experimentados por cada personaje en la etapa concreta de la aventura.

Una novela para disfrutar leyendo, tanto por su contenido como por su forma.