El cirujano de almas

Hay una frase que nos regala el autor en la introducción que bien puede definir a qué nos enfrentamos cuando decidimos leer una de sus magníficas novelas:
"Toda novela histórica debe serlo de aventuras, pues la historia es la mayor de ellas. También una novela negra , porque la vida es misterio y búsqueda"
Esta novela tiene una similitud respecto a El mercader de libros (2020) debido a que vamos mano a mano acompañando al protagonista en un viaje por diferentes tierras con una misión por completar, en este caso crecer en algo tan complicado como la cirugía en tiempos complejos como el Siglo XVIII y principios del XIX con la invasión napoleónica o la Guerra de la Independencia, que se dice pronto, y todo ello estando mal visto estudiar el interior de un cuerpo estando ello castigado.
Bruno es un crío que a sus 12 años debe partir de Bilbao hacia Barcelona en busca de un familiar para que se haga cargo de él, concretamente su tío Alonso Urdaneta, alguien que no lo recibirá con agrado. Bruno picado por la curiosidad y la ambición de todo joven decide ser aprendiz de cirujano , con lo que ello conlleva tener más viento en contra que a favor, más achaques que agradecimientos... pero él no se dejará amedrentar y hará todo lo que esté en su mano para aprender el arte de ayudar a una embarazada a dar a luz debido al gran número de muertes que se suman tras los partos.
Si bien nos llevará por diferentes derroteros, Bruno deberá viajar para seguir formándose. En esos vaivenes el chico deberá hacer uso de lo aprendido para ganar dinero y reconocimiento, sobrevivir, esquivar al ejército francés, encontrarse con el amor y no dejar de luchar contra viento y marea en la cantidad de zancadillas que se encontrará por el camino .
Si bien pienso que el autor baja un escalón de nivel respecto a su anterior novela reconozco que en ningún momento he tenido la sensación de aburrirme, y siempre he estado entretenido. Me ha resultado una lectura muy ágil y gustosa pero a la vez algo lineal en su trama principal. Algo que me gusta de él es que no tiene la necesidad de aburrirnos con largos datos históricos , va directamente al grano y si nos mete algo lo hace de una forma muy amena siendo parte de la trama. El final particularmente me ha gustado muchísimo, puede ser algo predecible pero sabe manejarlo de forma inteligente y juega muy bien con el lector en los últimos capítulos. Es usted maravilloso Señor Zueco.